Las fuerzas del orden liberaron a una francesa de 16 años a quien una banda forzaba a prostituirse en Bélgica, anunció este miércoles la fiscalía de Bruselas, que busca identificar a otras víctimas francesas.
El grupo fue desmantelado y el juez de instrucción decretó prisión provisional para siete sospechosos, “entre ellos el organizador de la prostitución de la joven”, precisó el ministerio público en un comunicado.
Los detenidos son sospechosos de explotar sexualmente a la menor de “más de 16 años” y “de trata de seres humanos”, agrega la fiscalía, precisando que una investigación sigue en curso para identificar a otras víctimas.
La adolescente liberada, que figuraba como desaparecida en Francia, había sido encerrada en una casa de Uccle, una localidad residencial al sur de Bruselas, y obligada a prostituirse. Según medios belgas, la policía judicial la encontró alertada por un conocido.
La joven se había marchado de su domicilio a finales de noviembre por una pelea en su centro educativo.
A continuación, se marchó a Bélgica junto a su novio francés que la “vendió por 2.000 euros” en Bruselas, precisa el diario flamenco Het Nieuwsblad, afirmando que “en dos semanas, unos 160 hombres entraron en contacto” con ella.
La joven de 16 años fue encerrada posteriormente la pandilla en un un sótano en Uccle y un hotel en Ixelles. La banda tomó el control del teléfono móvil de la niña y creó un perfil en línea para ella en un sitio web de prostitución, cobrando una tarifa por hora de €150.
La policía descubrió que otras dos niñas francesas menores de edad también fueron encerradas durante varias semanas y forzadas a prostituirse por la pandilla.
Dos raperos oriundos de Bruselas figuran entre los siete sospechosos, según los medios belgas.
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