El mandatario ha sido visto pocas veces desde su derrota electoral, hecho que su entorno atribuye a su estado de salud.
El aún presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fue ingresado en la noche del jueves en el Hospital de las Fuerzas Armadas de Brasilia por un fuerte dolor abdominal, zona en la que recibió una apuñalada durante su campaña en 2018 y que ha provocado que pase por quirófano desde entonces en cuatro ocasiones.
El nuevo diagnóstico es una hernia en la cicatriz que le dejó la cirugía por aquel ataque. Ya en 2019 tuvo que ser operado de nuevo en esta zona debido a complicaciones.