Sigue escalando la pugna dentro de la Democracia Cristiana, a raíz de la suspensión de la militancia del expresidente de la República, Eduardo Frei Ruiz-Tagle, en medio de la expectación por la decisión final que debe adoptar el Tribunal Supremo de la tienda.
Son varias las voces que han salido a deslegitimar al organismo, apelando -entre otras cosas- al hecho que cuatro de los nueve miembros debieron haber cesado en sus cargos hace dos años, según las bases establecidas por la falange.
Sin embargo, la crítica de fondo se mantiene en una falta de claridad en torno al objetivo que perseguiría el Tribunal al evaluar la expulsión del expresidente tras reunirse con José Antonio Kast.
Una de las voces más críticas ha sido la del senador Iván Flores, quien más bien se inclinó por calificar el hecho como una “persecución” contra Frei.
A su juicio, lo que está ocurriendo sería una coyuntura peligrosa para la colectividad. En ese sentido, dijo que su posible expulsión podría fracturar aún más el partido que ya enfrenta una crisis de militancia y que -en estos momentos- debe estar concentrada en definir su posición en el espectro político.
Por su parte, el exsubsecretario General de la Presidencia en el gobierno de la expresidenta Michelle Bachelet e histórico militante DC, Víctor Maldonado, apuntó a que las diferencias políticas deben tener un tratamiento político, no disciplinario.
En ese sentido, propuso que el Tribunal Supremo actúe con lentitud y se priorice la conversación, ya que afirmó que sería infructuoso expulsar a un expresidente de la falange.
Mientras, el diputado y jefe de bancada DC, Héctor Barría, llamó a dejar que las instituciones funcionen y pidió esperar resultados tras el debido proceso.
No obstante, sugirió que el exgobernante debería participar más activamente en la DC, en lugar de aparecer solo como una voz disonante.
Dentro de la falange señalan que la decisión del Tribunal Supremo debería conocerse luego de las fiestas de fin de año.
Fuente: BioBioChile