El diputado por Atacama, Cristian Tapia Ramos, reaccionó con fuerza al reportaje publicado por The Clinic, que reveló la trama de vínculos entre el abogado de la ANFP Gonzalo Cisternas, el abogado Gonzalo Migueles —estrecho colaborador de la ministra Ángela Vivanco y del operador Antonio Ulloa— y su eventual rol en las presiones que afectaron el ascenso deportivo de Deportes Vallenar en 2017.
Según The Clinic, Cisternas no solo actuó como abogado asesor de la ANFP, sino que mantenía una relación profesional directa con Migueles, pieza clave del círculo de Vivanco y del entramado de influencias revelado en el Caso Ulloa. Este vínculo —reflejado en comunicaciones, reuniones y su rol como bisagra entre la ANFP y operadores judiciales— explicaría parte de las maniobras que terminaron revirtiendo en oficinas un resultado ganado legítimamente en la cancha.
Los nexos que revelan una trama mucho mayor
El reportaje expone que Gonzalo Cisternas, entonces abogado de la ANFP, mantenía un vínculo directo con Gonzalo Migueles, operador jurídico del círculo cercano de Ángela Vivanco —la “muñeca bielorrusa”— y también con Antonio Ulloa, figura central del Caso Vallenar. Para el diputado Tapia, esta nueva red de relaciones confirma lo que por años se sospechó sin poder acreditar:
“Siempre supimos que aquí operó algo más que una decisión administrativa. Hoy, con esta información, queda claro que había un circuito de operadores, abogados y autoridades que intervinieron donde nunca debieron intervenir”.
Pero, según Tapia, la trama no se reduce solo a operadores judiciales. El diputado subrayó que en el ámbito deportivo existían relaciones directas que influyeron en el desenlace, destacando la responsabilidad del entonces presidente de la ANFP, Arturo Salah.
“En ese entonces Arturo Salah fue uno de los grandes responsables, porque él era presidente de la ANFP y era además compadre de Carlos Encina, dueño de Melipilla junto a Leonardo Zúñiga”, afirmó.
Tapia agregó que, según su conocimiento y experiencia en el mundo del fútbol regional, Encina y Zúñiga trabajaban estrechamente con Salah, y que a ese grupo se sumaba Vladen Canales, a quien también sindica como parte del entramado que terminó afectando directamente a Deportes Vallenar.
“Toda esta mafia, esta dupla Encina–Zúñiga junto a Salah y Vladen Canales, fueron los culpables directos de lo sucedido con Deportes Vallenar”, sostuvo.
De acuerdo al reportaje, este conjunto de intereses —de operadores judiciales por un lado y dirigentes deportivos por el otro— terminó configurando una presión externa que modificó un resultado que el árbitro Eduardo Gamboa ya había cerrado oficialmente a favor de Vallenar.
Tapia insistió en que estas revelaciones permiten comprender la magnitud del daño sufrido por la ciudad:
“Aquí hubo un engranaje completo. No fue casualidad. No fue un error. Fue una red que, por encima del reglamento FIFA, terminó matando la ilusión de toda una ciudad y de una generación de jugadores”.
“Hoy sabemos cómo operó esta red de poder”
El parlamentario recordó que el árbitro Eduardo Gamboa, en su informe oficial, dejó establecido que Vallenar ganó 5-4 en penales, asegurando así el ascenso a la Primera B en 2018.
“El reglamento FIFA es claro: la última palabra la tiene el árbitro. Aun así, esa misma noche comenzaron presiones para repetir los penales en La Serena. Lo que pasó aquí es único en el mundo: por un acto administrativo nos quitaron un ascenso ganado legítimamente”, acusó.
Exige reparación institucional y reapertura judicial del caso
Tapia sostuvo que la ANFP debe reparar el daño institucional, otorgando el cupo que Vallenar ganó en cancha.
Asimismo, pidió reabrir el expediente tanto en la Corte de Apelaciones de Copiapó como en la Corte Suprema, con el fin de determinar “qué influencias se ejercieron, quiénes participaron y cuánta plata se movió”.
“No descansaremos hasta que se haga justicia con Deportes Vallenar”, enfatizó.
“La herida sigue abierta”
El diputado recordó que él mismo fue fundador de Deportes Vallenar cuando ingresó a Tercera División:
“En menos de cinco años llegamos a Primera B por mérito deportivo. Por eso duele tanto: lo que ganamos en la cancha nos lo quitaron en escritorios y llamadas”.
Finalmente, sostuvo que lo ocurrido refleja un problema mayor que trasciende lo deportivo:
“La corrupción que llegó al fútbol y al Poder Judicial debe terminar. Este caso lo demuestra con claridad”.
Fuente: Comunicaciones diputado Tapia