Rosemary Bermudes, una de las pasajeras del bus interprovincial que volcó en la Ruta 5 Norte dejando tres fallecidos y decenas de heridos, entregó un crudo testimonio sobre lo vivido durante la tragedia.
La mujer relató que desde la salida en Iquique notaron fallas en el vehículo y que durante gran parte del viaje el conductor manejaba a exceso de velocidad. “Por lo menos a mí no me pareció el servicio. Venían a exceso de velocidad, hicieron una parada pasada la medianoche y luego continuaron igual. Yo me quedé dormida y cuando desperté fue con el alboroto y una persona que cayó encima de mí, me estaba asfixiando”, señaló.
Bermudes sufrió una fisura en la cervical, mientras que su hija resultó con una fractura en la columna. “Es difícil… tú no te imaginas el susto que uno siente, ver la muerte de frente. Es horrible ver a alguien fallecido al lado tuyo”, agregó entre lágrimas.
Respecto a la parada del bus, la pasajera indicó que hubo una situación extraña: “Los autobuses siempre se estacionan al frente del paradero, pero este lo dejaron atrás, donde no se veía. Ni siquiera consumieron alimentos como suelen hacer, y luego regresaron con el bus. No sé qué estaban haciendo”.
La mujer también confirmó que logró ver al menos a dos de los fallecidos, entre ellos un conocido que viajaba en el mismo grupo de migrantes venezolanos que se formó durante el trayecto.
Finalmente, cuestionó el estado del conductor, quien según la información preliminar entregada por las autoridades, dio positivo a drogas y será formalizado. “Lo vi muy tranquilo, incluso ayudando a sacar pasajeros. No entiendo cómo alguien que provocó tantas vueltas con el bus podía estar tan relajado”, expresó.
