Representantes de Ni Una Menos Chile visitaron la región de Atacama con el objetivo de reunirse con familias de mujeres y niñas desaparecidas. La visita forma parte de un trabajo articulado que busca informar, sensibilizar y exigir justicia, reforzando la necesidad de una mirada estatal comprometida con erradicar la violencia extrema hacia las mujeres.
María José Fuentes, representante de Ni Una Menos Chile, explicó que como organización decidieron viajar a Atacama para reunirse con las familias de mujeres y niñas desaparecidas, así como con organizaciones feministas que han estado activas en la región durante años.
El objetivo de su visita es comprender de manera más profunda la problemática que afecta no solo a la zona, sino a todo el país, además de generar alianzas, informar, sensibilizar y visibilizar la desaparición forzada de mujeres y niñas en contexto de democracia, en manos de particulares.
Esta situación, señaló, adquiere una especial sensibilidad en Atacama por los casos de Catalina, Thiare y Tania. Fuentes recalcó que se trata de un problema que debe ser abordado por toda la sociedad, no únicamente por las familias o las organizaciones.
Propuestas concretas: un día nacional y una tipificación legal
Entre las propuestas que promueven, destaca la intención de establecer el 9 de noviembre como el Día Nacional contra la Desaparición Forzada de Mujeres y Niñas, y la necesidad urgente de tipificar este delito de desapareción forzada en contexto de democracia como un agravante.
“Las mujeres no pueden ser asesinadas y, además ser asesinadas por femicidios, hacer su cuerpo desaparecer. Eso es un doble delito que revictimiza tanto a las familias como a toda la sociedad”, remarcó Fuentes.