Sushis con salsas de trufa, crocantes de kanikama y gyosas bañadas en salsa de chocolate amargo, son parte de la carta que ofrece Jiro Sushi, del copiapino Jean Bereaud y que hoy vende a través de Rappi y Pedidos Ya. El emprendedor forma parte de los 10.000 emprendedores de todo el país que han sido apoyados por Fundación Luksic.
Pasó de ser un hobby para sorprender con platos ricos y extravagantes a su familia, a ser su trabajo y fuente de ingresos. El copiapino Jean Bereaud, tras recibir muy buenos comentarios de sus platos y preparaciones de sushi, decidió ir más allá: “Mis dos hermanos fueron mis maestros y después trabajé en distintos locales donde empecé a improvisar con recetas, inventar cosas. Con todo lo que aprendí, me dieron ganas de armar algo y llevarlo a un nivel más personalizado para el público”.
Uno de sus hermanos le enseñó gastronomía japonesa y el otro, decidió apoyarlo y orientarlo a formalizar su negocio y dar vida a Jiro Sushi con un local en la calle Bernardo O’Higgins de Copiapó. “Ambos fueron fundamentales, sobre todo para cumplir con todas las exigencias sanitarias y legales. Después el estallido nos afectó bastante y con la pandemia decidimos parar la producción ya que nuestros padres tienen una enfermedad de base y quisimos extremar los cuidados”, explica Jean.
A fines de 2021, asomándose una vuelta a la normalidad, volvió a abrir las puertas de su restaurante pero ahora su oferta sería solo a través de take away (comida para llevar) y despachos a domicilios. “La gente nos empezó a comentar que cada roll tenía un sabor único, que eran diferentes y nunca vistos. El delivery enganchó harto y el boca a boca nos hizo llegar a más clientes”, dice el emprendedor.
Y para diversificar su oferta probó con preparaciones gourmet y exóticas. Además de los tradicionales rolls, incorporó algunos con salsa de trufa, bañados en crocante de kanikama y un producto estrella: las gyosas en base a salsa de chocolate amargo. “Los pedidos fueron aumentando así que entramos a Rappi y PedidosYa para comercializar de mejor forma nuestros productos en la ciudad y nos ha ido bastante bien”, cuenta Jean.
Con el objetivo de impulsar su negocio postuló a la quinta versión del programa de Impulso Chileno de Fundación Luksic y se convirtió en uno de los ganadores que recibirá financiamiento, capacitaciones y mentorías de la mano de expertos. “Queremos mejorar la logística de la última milla, invertir en marketing y publicidad, mejorar la fachada del local y aumentar nuestro inventario. Respecto a las clases quiero aprender a llevar bien el control de finanzas y administración del local, es algo importante que tengo que poner énfasis”, explica el emprendedor.
Apoyando a emprendedores de todo Chile
“Para generar crecimiento a nivel país es fundamental apoyar la descentralización y por eso estamos comprometidos con entregar herramientas de calidad a los emprendedores y emprendedoras de la zona norte, centro y sur, quienes han demostrado su talento, creatividad y aporte a la economía local”, dice Cristián Schalper, director del área de Emprendimiento de la Fundación.
Jean Bereaud (32) es parte de los más de 10.000 emprendedores que han sido apoyados por los programas de Emprendimiento de Fundación Luksic. En 2022, a través de Impulso Chileno, Impulso Inicial y Despega Mujer, la entidad apoyó a más de 600 emprendedores y emprendedoras de la zona norte, de Arica a Coquimbo.
“Para mi, ser ganador del programa me demostró que si se trabaja duro y si uno se rodea de la gente que lo motive a mejorar se pueden lograr grandes cosas. Siempre hay que tirar para adelante. Impulso Chileno es un gran empuje para seguir creciendo”, dice con orgullo Bereaud.