Redecorar los espacios habitables es uno de los desafíos más divertidos al momento de decidir qué cosas cambiar de un hogar, especialmente en la cocina, que es el lugar más transitado y tiene diversos usos que no implican sólo sentarse a comer. Es por eso que, de vez en cuando, es necesario hacerle algunos cambios.
Los pisos, las pinturas de las paredes, los muebles de cocina, la iluminación y los objetos decorativos configuran la estética de este espacio aunque resulte imposible cambiarlo todo ya que implicaría un alto presupuesto. Entonces, la mejor idea para darle vida a este cuarto es establecer bajo qué términos y en cuánto tiempo se pretende terminar, es decir: ordenarse.
Definir un presupuesto para cambiar los muebles de cocina
Hay formas de evitar gastar demasiado dinero y esta es una. Establecer un límite de dinero permite no salirse del objetivo y comprar lo necesario. Una de las opciones es buscar muebles de cocina en oferta en páginas de internet, que suelen tener descuentos en efectivo o cuotas sin interés algunos días de la semana.
Otra manera conveniente para ahorrar es esperar al Cyber Chile 2021, un acontecimiento anual que se creó por la Cámara de Comercio de Santiago y consiste en una jornada de tres días con descuentos en distintos artículos a través de las tiendas online. Esto incluye a categorías como las del hogar, electrodomésticos y computación.
Durante estos días pueden conseguirse muebles de cocina baratos y de calidad, muchos con envío gratis y disponibilidad de pagos sin interés o con intereses fijos. Las oportunidades de compra en esta jornada, así como en el Black Friday, hace que sea posible adquirir productos que en otra época del año se van del presupuesto.
Elegir un estilo
Una de las cosas más importantes para la decoración de una cocina es el estilismo y los colores, hay que saber que al ser un ambiente concurrido y con múltiples usos, debe brindar tranquilidad a quien lo frecuente, ya sea sólo para desayunar o pasar la tarde de home office. El mobiliario, la pintura, los pisos y la calidez de la iluminación serán las piezas fundamentales para lograrlo.
No es lo mismo elegir entre muebles de cocina de madera combinados con hierro blanco o con hierro negro, y así mismo si el color fuera otro como gris o azul. El negro otorga formalidad y orden mientras que el color blanco se asocia a la distención y la calidez. Los colores como el azul y el gris generan un ambiente positivo y alegre.
Estilo de cocina moderno
Los muebles de cocina modernos son en su mayoría blancos combinados con maderas claras. Una cocina con estética moderna es aquella que fusiona el hierro y la madera, en sus diferentes tonos y en objetos como lámparas, estanterías, sillas y vajilla. Por ejemplo, las lámparas de metal colgantes, color ocre, blanco o negro.
Los colores neutros priman en estos estilos para que, al agregar algún adorno de color, la armonía no caduque. La iluminación natural aporta el componente principal, es por eso que lo ideal es que las paredes sean blancas y también los muebles, así la luz natural se destaca sobre la artificial.
Los objetos decorativos además de ser más económicos aportan en cada estilo el toque final, como los cuadros, las pequeñas estatuas de yeso, los floreros en el centro de la mesa con flores frescas e incluso las cortinas.
Los pisos suelen ser blancos o de madera. Lo que se pretende de estos estilos es generar tranquilidad y que los muebles no sean los protagonistas sino la presencia de una coexistencia armónica entre todos los componentes, que funcionen como una unidad.
Estilo de cocina rústico
Los muebles de cocina rústicos permiten jugar más con la decoración de las paredes y los pisos, ya que no tienen reglas específicas de diseño como el estilo moderno. En cambio, en este está permitido combinar colores y texturas siempre y cuando se mantenga la esencia.
El diseño rústico está liderado por la madera oscura y de tonos rojizos, que simulan la estética de una cabaña. Con sillones con estructuras fuertes y almohadones de tela entramada con mantas gruesas tejidas, esta forma resalta la estructura de cada espacio y no su convivencia con el resto del decorado.
En este tipo de estilos cada mueble tiene su impronta y su función, se diferencia con el estilo moderno porque es más hogareño, y en lugar desenfocarse en la luz natural su objetivo es conseguir la sensación de hogar.
Los colores tierra como el naranja, el verde oscuro, el marrón o el amarillo cálido hacen de este estilo una marca registrada y los muebles que pueden acompañarlo son de maderas oscuras, que permiten que estos tonos resalten y hagan contraste.
Otra de las finalidades de estos estilos es simular un contexto campestre aunque las cocinas estén situadas en un edificio en el medio de una gran ciudad. Lo rústico propone una desconexión de pantallas y de colores fríos como el blanco o el gris, para crear una proximidad con la naturaleza.
Darle el toque personal
Los estilos definidos son modos de tener un norte en lo que respecta a la decoración, sin embargo, el toque personal es importante para que la cocina y todos los ambientes de la casa tengan vida y quienes conviven en estos y los frecuentan puedan empatizar y sentirse a gusto.
Agregar cuadros con fotografías familiares, de amigos y de las mascotas hará del ambiente uno más cálido, más allá de ser rústico, colonial o moderno. Los detalles personales, los recuerdos de viajes, cada objeto con valor sentimental aportará a los espacios el calor del hogar necesario.
Por último, la calidad de los muebles es fundamental. Lo recomendable es comprar muebles de materiales resistentes porque puede que cada tantos años las ganas de renovar regresen y ¿qué mejor que modernizar los muebles antiguos? Con esto se evita tener que comprar nuevos y reciclar los antiguos, pintar, barnizar o modificar su estructura.
