La noche de este jueves, el intendente Patricio Kuhn entregó un balance oficial de la búsqueda de Tomás, el niño de 3 años y 7 meses extraviado el miércoles en Caripilun, una zona rural de la provincia de Arauco.
De acuerdo a cifras de Gobierno, actualmente son cerca de 300 personas las que están dedicadas a alguna labor en medio del plan de rescate entre voluntarios de Bomberos, personal de Carabineros, la Policía de Investigaciones, de las Fuerzas Armadas, expertos y voluntarios.
Kuhn hizo nuevamente un llamado a la población general a no acudir a la zona a modo de formar parte de la búsqueda ya que – pese a que se agradece la buena intención – los equipos necesitan espacio para que las unidades caninas y los drones con huella térmica se desplacen sin distracciones.
“Los drones necesitan detectar cualquier fuente de calor. Si hay personas circulando vamos a tener interferencia. Lo mismo pasa con los perros de rastreo. Hay varias unidades especializadas y tienen que hacer su trabajo tranquilas”, sostuvo.
Además, el intendente aseguró que el diálogo con el Ministerio del Interior ha sido continuo, desde donde ordenaron llevar a cabo la búsqueda hasta tener resultados.
“Nos hemos comprometido a acompañar este trabajo hasta que encontremos a Tomás. Esa es la instrucción, lo que vamos a hacer, el trabajo en el que están empeñados todos los que están acá”, dijo el intendente ante la prensa.
Equipos
En el punto de prensa, Kuhn confirmó que se recepcionaron nuevos equipos enviados desde Santiago, aparte de la llegada de refuerzos para apoyar la búsqueda, como por ejemplo efectivos de la Brigada de Ubicación de Personas (Briup) de la PDI.
Cerca de las 22:00 horas se dio fin a una reunión de coordinación en la que se acordó que, de obtener algún hallazgo con los drones, personal de Infantería entrará en acción.
No obstante, el intendente descartó que equipos terrestres vayan a operar durante la noche por la falta de luz natural.
Según confirmó Kuhn, la superficie de búsqueda se amplió de las 3 a 4 hectáreas iniciales en línea con las necesidades de la investigación y la falta de resultados hasta el momento.
“Desde que llegamos no hemos parado de buscar. Las prórrogas más largas son entre las entrevistas y, de verdad, todo el dolor que tengo es inexplicable”, indicó a Radio Bío Bío Moisés Bravo, padre del niño.
Fuente: BioBioChile
