En el mes de la lactancia, es importante rescatar y resaltar la lactancia materna, la cual es la mejor alimentación que puede tener nuestros niños.
El Covid-19 al ser una enfermedad emergente, hay mucho que aún no sabemos del comportamiento del virus. Es fundamental llamar a la calma y tranquilidad a las familias, y mantener el foco en las acciones de prevención personal que finalmente ayudarán a toda la población para bajar los contagios.
Si bien el distanciamiento social es una de las estrategias probadas más efectivas para evitar la propagación del covid-19, en el caso del niño que amamanta y su madre presenta aspectos particulares.
El Seremi de Salud, Bastian Hermosilla, señaló “La leche materna contiene anticuerpos y células vivas con información inmunológica de la madre para proteger al lactante, y contribuye al desarrollo, los cuales juegan un rol clave en la protección contra infecciones”
Es importante destacar, que en madres positivas por COVID-19, se sugiere amamantar a sus hijos o hijas por sobre no amamantarlos (recomendación condicional con certeza muy baja de los efectos).
La alimentación con leche materna sigue siendo recomendada como la mejor alternativa para la alimentación de nuestros niños.
De acuerdo a la evidencia respecto a lactancia y COVID-19 es muy limitada. En la mayoría de los estudios, no se ha identificado el virus en la leche materna, lo que no implica necesariamente que esta sea una fuente de contagio para el niño.
Finalmente, cabe destacar que, en nuestras residencias sanitarias, tenemos actualmente 2 lactantes que se les entrega todo el apoyo para que mantenga una lactancia comprometida.