De seguro en más de un ocasión has sentido la necesidad de comer algo dulce o salado, preferentemente chocolate, helado o papas fritas. Esa ansiedad es comúnmente conocida como “antojo”.
En un principio se vinculó este fenómeno a la deficiencia de nutrientes. Sin embargo, la psicología plantea una escenario diferente.
Las psicólogas Eva Kemps y Marika Tiggemann de la Universidad de Flinders, en Australia, realizaron una investigación sobre el origen de los antojos y cómo poder controlarlos.
En este contexto, el estudio publicado en 2010 por la revista de la Asociación de Ciencia Psicológica, destaca que las imágenes mentales que nos hacemos de los alimentos, pueden ser claves para entender este fenómeno.
Para la investigación se le pidió a 130 estudiantes universitarios que recordaran y calificaran una experiencia previa a un antojo de alimentos. Posteriormente que se imaginaran a sí mismos comiendo su comida favorita y que calificaran diferentes modalidades sensoriales.
De este modo, los resultados de la investigación demostraron que la fuerza con la que los participantes deseaban un alimento, estaba directamente relacionada con la nitidez con la que lo imaginaban.
Este vínculo entre los antojos y las imágenes mentales (las cuales ocupan recursos cognitivos), podrían explicar por qué se genera esa sensación de ansiedad.
Según explican las especialistas, a medida que nos imaginamos un plato en específico, gran parte de nuestra capacidad cerebral se concentra en ese deseo e incluso nos cuesta realizar otras tareas.
Cómo combatir los antojos
Por otra parte, Kemps y Tiggemann plantean que sería posible generar el efecto contrario, es decir, utilizar los recursos cognitivos para reducir los antojos. Esta asociación podría ser usada por quienes desean perder peso.
Las autoras destacaron que los participantes que habían experimentado un fuerte antojo, redujeron el deseo de comer después de que imaginaran lugares comunes u olores.
En otro experimento, voluntarios ansiosos por consumir un alimento, miraron un patrón de puntos blanco y negros durante un rato, y aseguraron que eso fue suficiente para aliviar considerablemente su antojo.
“Visualizar determinadas imágenes en la mente podría convertirse en un método prometedor para poner freno a los antojos de alimentos”, detallan.
En otras palabras, una simple tarea visual puede ser un método útil. Asimismo, Kemps y Tiggemann detallan que esta herramienta podría usarse incluso para reducir deseos como el de la droga o el alcohol.
Fuente: biobiochile.cl