Una imagen que causó la indignación de todo un país. Este fin de semana, el fútbol boliviano estuvo en el ojo del huracán tras una insólita situación ocurrida durante un partido.
Oriente Petrolero cayó por 2-1 en condición de local ante el Guabirá. Sin embargo, la derrota pasó a un segundo plano debido a lo acontecido con Mario Cuellar, jugador del equipo dueño de casa.
Corría el minuto 74 del partido cuando el defensor se barrió para tapar un remate del Guabirá. Para mala fortuna suya, los tapones de su pie izquierdo se quedaron atascados en el pasto, por lo que sufrió una luxo-fractura de tobillo.
Sus desesperados gestos dieron cuenta de que se trataba de una lesión de gravedad por lo que rápidamente sus compañeros solicitaron atención médica. Fue entonces que se desató el papelón. Los camilleros ingresaron para llevar al jugador a la ambulancia cuando se dieron cuenta de un gran detalle.
El conductor de la ambulancia no se encontraba en ninguna parte y ante la desesperación del público y del cuerpo técnico, el jugador fue trasladado en la misma camilla afuera del recinto deportivo para encontrar a alguien que lo llevará a una recinto médico.
Ya en las calles de Santa Cruz, encontraron una solución. Cuellar fue subido a la cajuela de un taxi, donde los médicos lograron hacer un poco de espacio para trasladar al malogrado jugador, que según lo informado por su club, estará entre tres a seis meses en recuperación.
🤬❌¡VERGÜENZA MUNDIAL!
Mario Cuéllar, jugador de Oriente Petrolero, sufrió una dura lesión en la derrota de su equipo ante Guabira 1-2 en la liga de Bolivia. La ambulancia estaba dañaba y el jugador fue transportado en el baúl de un carro.
— Romario Quintero R (@RomarioQR) September 23, 2019
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