Un total de 3.300 cajas de fruta nacional -1.727 cajones de duraznos, 1.207 cajones de nectarines y 365 cajones de ciruelas- fueron retiradas de distintos puntos de venta en Estados Unidos, debido a una autodenuncia del exportador chileno Río Duero por posible contaminación con listeria.
Según indicó el ministro de Agricultura, Antonio Walker, la medida fue informada por el importador en ese país. Y luego de un análisis que se hizo en la planta, en Chile, se detectó presencia de listeria, lo que fue posteriormente informado a la Food and Drug Administration (FDA), autoridad sanitaria de Estados Unidos.
En tanto, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) remarcó -mediante un comunicado- que se encuentra recopilando todos los antecedentes y ya activó el protocolo correspondiente a este tipo de eventos, coordinándose con el Ministerio de Salud y la Food and Drug Administration (FDA) de ese país, con el fin de dar la mayor tranquilidad a los consumidores.
En concreto, la entidad aseguró que el Minsal ya inició la inspección correspondiente a los puntos críticos en materia de inocuidad, de acuerdo al reglamento sanitario de los alimentos.
Aunque dicho escenario, según declaró el secretario de Estado, no supone una pérdida importante para el país, ya que se trata sólo de 3.300 cajas. Pero sí habla de la seriedad del sistema exportador nacional, lo que -a su juicio- es reconocido en el exterior.
“Prima la historia. Y damos cuenta de la seriedad con la que trabaja Chile en términos de su cadena productora y exportadora. Y la gente que trabaja en productos perecibles sabe cómo funciona esta actividad económica. Pero lo más importante es que es un tema que detectamos a tiempo gracias a la seriedad con que Chile produce y exporta sus productos”, remarcó el titular de la cartera.
En tanto, el presidente de la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile (Asoex), Ronald Bown, si bien señaló que la versión oficial es la del Gobierno, sostuvo que la autodenuncia se realizó hace algunas semanas y que la idea de la industria es actuar a tiempo ante cualquier sospecha, para minimizar riesgos a la salud de la población.
“A lo mejor no es un hecho real, sino es una simple sospecha. Y frente a una sospecha, cualquier empresa prefiere evitar cualquier tipo de riesgo y opta por hacer un retiro voluntario”, aseguró.
Las frutas que debieron ser retiradas a raíz del recall de la FDA fueron distribuidas en 18 estados de norteamérica: Alabama, California, Georgia, Illinois, Kentucky, Maine, Massachusetts, Michigan, Mississipi, Nueva Yersey, Nueva York, Carolina del Norte, Ohio, Pennsylvania, Carolina del Sur, Tennessee, Virginia Occidental y Virginia.
Dichos productos ya habían sido distribuidos en locales minoristas y en sucursales de Walmart, Aldi y Costco, aunque hasta el momento en ese país no se han reportado personas con síntomas atribuibles a la listeria, que incluyen fiebre alta, dolor de cabeza, rigidez, nausea, dolor estomacal y diarrea.
En concreto, las alarmas se encendieron porque la enfermedad puede provocar infecciones severas, incluso fatales, sobre todo para poblaciones más vulnerables, como niños pequeños, personas enfermas, adultos mayores, o pacientes con problemas en el sistema inmune.
Con todo, según remarcó la FDA, los consumidores que hayan comprado dichos productos podrán “devolverlos al lugar de compra para obtener un reembolso completo”.
Fuente: Biobiochile.cl