Chinche pintado ha avanzado hasta la región de Coquimbo. SAG mantiene vigilancia preventiva en Atacama.
Debido al avance de la plaga chinche pintado (Bragada hilaris) a la colindante región de Coquimbo, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Atacama está llamando al sector agrícola regional a dar aviso ante posibles hallazgos o sospechas de su presencia,previniendo su entrada.
El insecto, detectado inicialmente en 2016 en la región Metropolitana y hoy bajo control oficial del SAG, daña a diversas especies tales como repollo, coliflor, brócoli, rúcula, y rabanito, entre otras, alimentándose de sus tejidos vegetales; así como también está presente en malezas del tipo yuyo, rábano silvestre y malvilla.
El SAG desde 2016 realiza en la región actividades de vigilancia, tales como prospecciones, muestreos y envíos a laboratorio, en predios hortaliceros de las provincias de Huasco y Copiapó, así como en zonas de malezas aledañas a caminos. La vigilancia también abarca puntos de abastecimiento de verduras y frutas, y en ese marco, para este año están programadas 35 estaciones de prospección en la región.
Si bien la plaga no se ha detectado en la región, el llamado a la comunidad y a los agricultores es a denunciar ante el Servicio la posible presencia del chinche pintado, comunicándose con las oficinas del SAG en Copiapó o Vallenar. Para ello, las personas pueden llamar por teléfono al 2212681 de la capital regional o al 2611567 en Vallenar, o escribir a contacto.atacama@sag.gob.cl, ante lo cual los inspectores SAG acudirán a corroborar su existencia y tomar las medidas necesarias, pues al ser una plaga bajo control oficial es obligatoria su denuncia ante el Servicio.
Los adultos de chinche pintado poseen un tamaño que oscila entre 5 a 7 mm, siendo el macho más pequeño que las hembras. Poseen forma de escudo y coloración de base negra con manchas rojas y amarillas. Los adultos y ninfas se alimentan de los tejidos vegetales causando reducción de los rendimientos al provocar marchitez, manchas necróticas y punteaduras. También genera daños al inicio del cultivo (emergencia y trasplante) produciendo muerte de plantines.