El edil de Huasco se reunió junto a alcaldes de otras comunas en zonas de sacrificio y elaboraron un documento que será entregado a la Moneda con 6 solicitudes. Entre ellas, estudios de salud a la población y la contratación de seguros médicos para las personas afectadas.
El alcalde de Huasco, Rodrigo Loyola Morenilla, se reunió junto a los alcaldes de los municipios de TilTil, Coronel y Quintero para dialogar sobre problemáticas comunes en las zonas de sacrificio ambiental y presentar a La Moneda un documento con propuestas al Gabinete del Ministerio del Interior.
En el ex Congreso se reunieron para elaborar un documento con seis puntos, en los que solicitan un Nuevo Trato para las comunas zonas de sacrificio como Huasco; una mayor participación de las localidades afectadas en la tramitación de los permisos ambientales; una norma de clausura frente a nuevos impactos en las Zonas de Sacrificio; Un Royalty a los impactos ambientales aplicable directamente a la tributación local, y modificaciones a la Ley de Rentas Municipales; Estudios de Salud en la población y atención preferente para los habitantes de estas localidades y la derogación de permisos administrativos otorgados a proyectos anteriores a las normas ambientales de la Ley de Bases y de la Evaluación Ambiental.
Loyola explicó que en el caso de Huasco y muchas otras zonas de sacrificio, se “requiere de un dialogo entre los ciudadanos y los titulares del proyecto a fin de que exista una aceptación social y la implementación de medidas directamente solicitadas por los locales, como parte del proyecto que se presenta a aprobación”.
Se requiere de “un cierre, una norma de clausura frente a nuevos impactos en las Zonas de Sacrificio, impidiendo el ingreso a evaluación de nuevos proyectos contaminantes o de impacto ambiental relevante, en las zonas de sacrificio que cuenten con planes de descontaminación o de prevención, o que se encuentren por sus mediciones, en zonas de latencia o saturación ambiental, aun cuando esta no haya sido declarada formalmente”, comentó Loyola.
ROYALTY AMBIENTAL
Respecto al royalty a los impactos ambientales, la primera autoridad comunal señaló que “para quienes conocen las realidades de los gobiernos comunales, las patentes municipales son una fuente de ingreso considerable y que en materia de redistribución de recursos y aporte directo en educación, salud y aportes y subsidios sociales para los sectores más vulnerables de una comuna, especialmente en aquellas comunas de mayor vulnerabilidad (donde con mayor frecuencia se instalan las faenas de grandes empresas que poseen activos de capital multimillonarios), resultan esenciales”.
Junto con las externalidades negativas de carácter ambiental por todos conocidas que provoca la gran industria, dijo Loyola, “también nos encontramos con el efecto positivo de esa industria en una comuna de recursos escasos, el aporte que generan en ingresos por pago de patentes municipales. Sin embargo, y pese a que las normas sobre tributación fiscal y tributación municipal son diversas, la Ley de Rentas Municipales considera, para la determinación del monto a pagar por patentes municipales, como elemento esencial, el establecimiento del capital propio de la empresa”.
“Si al capital propio se le han aplicado beneficios tributarios como la depreciación acelerada y ahora, la depreciación instantánea, el efecto sobre el pago de la patente municipal por las empresas que se acojan al beneficio tributario fiscal, será caótico, empresas de enorme capital podrían terminar pagando el mínimo, pagarían la misma patente que un comerciante de comida al paso, y eso es inaceptable. Ya ha ocurrido en el pasado y es nefasto porque si bien el Estado solamente difiere el pago del impuesto en el tiempo, los municipios nunca recobran esas patentes, lo que demuestra el sesgo centralista de una reforma de este tipo, por eso es que resulta importante que se establezca en la reforma tributaria que dichos mecanismos de tributación fiscal interna no afectarán el cálculo del capital propio para el efecto del pago de patentes municipales”.
La idea, dijo Loyola, es el establecimiento de una norma tributaria, que disponga con total claridad, que los beneficios tributarios fiscales, como las depreciaciones, no incidirán en la determinación del capital propio para el efecto del pago de las patentes municipales, “puesto que si buscamos con esta reforma tributaria, una mayor recaudación y una mejor distribución para poner término a las desigualdades sociales, el rol de los municipios es esencial, y los pocos recursos con que ellos cuentan, no pueden verse afectados nuevamente, siendo esta una oportunidad para corregir un vicio del sistema tributario que afecta directamente a uno de los sectores más vulnerables y que mayor carga de tareas posee como es el sector Municipal”.
El alcalde de Huasco, también solicito junto a los alcaldes de las otras tres comunas en zonas de sacrificio, que se realicen estudios de Salud en la población y atención preferente para los habitantes de estas localidades, por parte de la red de salud pública. Necesitamos “contratación de seguros médicos a la población más vulnerable en caso de aquellas inversiones que según los estudios internacionales, afectarán en relación de causalidad la salud de las personas”, y junto con ellos, pedimos la “derogación de permisos administrativos otorgados a proyectos anteriores a las normas ambientales de la Ley de Bases y de la Evaluación Ambiental, a fin de que deban someter sus instalaciones a un proceso de evaluación y actualizar sus instalaciones”, explicó.