El Presidente de la Asociación de Productores de Pisco A.G., Pelayo Alonso, frente a la nueva fórmula de recaudación fiscal, presentada por el Ministro de Hacienda, Alberto Arenas, subrayó que “si bien es cierto no nos deja contentos, pero recoge en parte nuestras aspiraciones”.
El gremio valora el esfuerzo del ejecutivo, pero manifiesta su cautela, porque el proyecto con las indicaciones, debe seguir la votación en sala de la Cámara de Diputados y luego pasar a las Comisiones del Senado, y a la votación ampliada de la Cámara Alta, para transformarse en ley.
Con cautela, recibió la Asociación de Productores de Pisco A.G., las indicaciones que presentó el Ministro de Hacienda, Alberto Arenas, al artículo referido a los impuestos de las bebidas alcohólicas, que forma parte del Proyecto de Reforma Tributaria, eliminando el pago de 3 UTM, por cada hectolitro de alcohol puro, y presentando un base de 18%, más 0,5° por cada grado alcohólico.
Con esta nueva propuesta, se eleva del actual 27% de impuesto específico que tributa el pisco, a un alza, entre 35,5% a 38% más el IVA, es decir el pisco pagaría en su totalidad, entre un 54,5% a 57% de impuestos, pero menor a los 74% de impuestos, proyectado con la propuesta inicial.
El Presidente de la Asociación de Productores de Pisco, Pelayo Alonso manifestó que “valoramos el esfuerzo y apoyo transversal de los parlamentarios de la III y IV regiones en su conjunto, quienes permitieron que esta Asociación, asistiera a la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, y que pudiéramos plantear nuestros pensamientos, ver las externalidades negativas que esto implicaba, y de esta manera, llegar a una fórmula, que si bien es cierto no nos deja contentos, pero recoge en parte nuestras aspiraciones y causa un impacto negativo menos malo de lo que originalmente consideraba”.
Alonso afirma que la agroindustria pisquera, al igual que todas las actividades económicas del país será afectada de la misma manera, en la generalidad de la reforma tributaria, “hoy en día, se le está exigiendo un esfuerzo adicional. Y nosotros hemos insistido que nos causa un daño de proporciones. Se ha retirado por parte del ejecutivo, la creación del nuevo impuesto que significaban las 3 UTM por cada litro de alcohol a 100°, que repercutía en el alrededor de un 20% de mayor tributo. Pero sin embargo, el actual impuesto del 27% nos va aumentar a 35,5% o 38% dependiendo de la graduación alcohólica. Va a ser un aumento importante desde el 27% al 38% en su tributación. Este mal es menor, que subir del 27% al 73% a 75% que contemplada la propuesta original. Desde ese punto de vista valoramos el esfuerzo del ejecutivo, y estaremos conscientes y sabremos realizar este esfuerzo adicional, en la medida que esta propuesta sea la definitiva”.
Sobre cómo esta alza del impuesto afectaría a los 2.734 pequeños productores de uva pisquera de las regiones de Atacama y Coquimbo, que en un 85% del total, tiene menos de 5 hectáreas de uva, y en su mayoría son parte de las cooperativas, Alonso explicó que “todos los aumentos de costos, van finalmente a la línea base, que es el precio del kilo de uva. Esto va a tener un efecto. Nuestro gran desafío, es ver de qué manera este impacto negativo repercuta en la menor medida posible al productor de uva pisquera”, indicó.